Uruguay y Colombia anunciaron que no reconocen la “ilegítima asamblea” de la dictadura venezolana de Nicolás Maduro

Los gobiernos de Uruguay y Colombia emitieron sus comunicados este martes para rechazar la juramentación de la nueva Asamblea Nacional del régimen de Nicolás Maduro que se instaló en Venezuela tras las elecciones fraudulentas del pasado 6 de diciembre.

El ministerio de Relaciones Exteriores del gobierno de Luis Lacalle Pou señaló en una declaración oficial que “Uruguay no reconoce la legitimidad de la Asamblea Nacional instalada en el día de la fecha en Venezuela, debido a que ella es el resultado de un acto electoral realizado sin las mínimas garantías de transparencia, inclusión y verificación”.

“Tal como fuera señalado en el Comunicado de Prensa del 7 de diciembre de 2020, Uruguay considera que estos comicios no fueron llevados a cabo de conformidad con los principios y valores democráticos, al no existir garantías para la participación libre y en igualdad de condiciones de los grupos de la oposición venezolana”, señaló la cartera a cargo del canciller Francisco Bustillo. “La falta de control electoral por parte de organismos internacionales imparciales y responsables es un factor fundamental que ha viciado de nulidad el acto eleccionario por el cual se pretende investir a la nueva Asamblea Nacional”, advirtió el texto.

Y añadió que “la violación del estado de derecho por parte del régimen dictatorial de Nicolás Maduro, así como la falta de separación de poderes en Venezuela, que impide la acción independiente de la justicia, reflejan un marco de degradación de las instituciones democráticas que se agrava con la instauración de un órgano parlamentario cuya integración es ilegítima”.

El gobierno de Uruguay, además, reiteró su “ferviente llamado para que todos los actores políticos y sociales venezolanos se comprometan con firmeza en la búsqueda de una salida institucional democrática, pacífica y consensuada para la actual crisis que vive el país, a través de elecciones libres, transparentes, inclusivas y con verificación internacional”.

Por su parte, el Gobierno colombiano señaló que no reconoce a los nuevos miembros de la Asamblea Nacional de Venezuela y que sigue apoyando al líder opositor Juan Guaidó, que instaló este martes un Parlamento paralelo.

El Ministerio de Relaciones Exteriores del gobierno del presidente Iván Duque recordó en un comunicado que “Colombia no reconoce legitimidad ni legalidad a los comicios fraudulentos del 6 de diciembre de 2020, en consideración a la manera antidemocrática e irregular con la que se adelantaron los mismos”. Por ello señaló que tampoco reconoce a quienes “resultaron ilegítimamente favorecidos para integrar un cuerpo colegiado conformado sin las mínimas garantías de imparcialidad, libertad, igualdad de oportunidades y justicia”.

“La elección en esas condiciones y el cuerpo colegiado resultante de ellas es una expresión clara de la existencia de un régimen espurio, carente de transparencia y representatividad”, agregó la Cancillería, a cargo de la ministra Claudia Blum.

El Gobierno colombiano seguirá reconociendo el Parlamento continuista de Guaidó, a quien reconoce como presidente interino de Venezuela desde principios de 2019.

Guaidó ha decidido que la AN funcionará este año bajo la figura de la Comisión Delegada, una instancia contemplada en la Constitución para operar sólo durante los períodos vacacionales de los diputados y que está conformada por menos del 20% del pleno.

En ese sentido, el Gobierno colombiano aseguró que, “en concordancia con lo establecido en la Constitución Política de Venezuela”, reconoce “la existencia de la Comisión Delegada de la Asamblea Nacional, encabezada por su presidente, Juan Guaidó”.

Igualmente, el Ministerio de Relaciones Exteriores hizo un llamado a la comunidad internacional para que condene “las imposiciones y abusos de la dictadura y apoyen los esfuerzos de los venezolanos para el restablecimiento del Estado de Derecho y el respeto de sus libertades”.

Con información de EFE